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Mostrando las entradas etiquetadas como voluntad

*¿Iguales? Lo dudo mucho.

Nunca me había dolido tanto que me compararan con alguien a quien ni siquiera conozco, y mucho menos el que me dijeran las palabras "son iguales", palabras que sé, con absoluta certeza, que no son ciertas. De haberme hallado bajo la luz de los focos, ese dolor habría sido claramente palpable en mi mirada. No habría sido capaz de esconderlo, me encontré totalmente desarmada y desprovista de todo disimulo en esos momentos.  Mis nervios me fallaron. Aguanté las lágrimas, pero algunas rebeldes afloraron a pesar de mi resistencia, no recuerdo si lo hicieron en ese preciso instante, creo que supe guardarlas durante un rato, pero escaparon más adelante en contra de mi voluntad. Y también lo hicieron después, en varias ocasiones, hasta que llegó el momento en el que ella secó la última de mis lágrimas -de esa noche, al menos.  Desde ese instante, empecé a actuar como si nada pasara durante el resto de nuestro encuentro, que duró hasta el beso de la despe...

- Gritar

Estoy harta de querer gritar y prohibírmelo a mí misma... ¿Por qué? Por el temor de expresar mis sentimientos, mis ansias, mis anhelos y mis miedos en voz alta y, sobre todo, de dejar que otros los escuchen.  Sólo quiero gritar, ¡¡¡¡GRITAR!!!! Sin miedo, sin censuras, sin causas ni consecuencias. Simplemente gritar, desahogarme. Perderme en un grito que sane todas las heridas que me agotan, que me superan, que me consumen. El mayor problema viene cuando ni siquiera estando sola dejo que esa voz que lucha por salir y cuyas palabras mis labios quieren pronunciar, lo haga, porque entonces estaría dándole la oportunidad a la realidad de golpearme a mano abierta dejando tras de sí una marca que solo el tiempo lograría borrar... Y lo cierto es que no estoy como para perder el tiempo esperando a que esas marcas se vayan. Pero, a veces, esa voz consigue engañar a mi voluntad y se pronuncia casi sin permiso, como en nuestro querido último día del mes de marzo, es decir, aye...